Encuentro de ultraligeros procedentes de varios puntos de España

Este fin de semana, el Aeródromo de Santa Cilia se convertía en anfitrión de unos invitados muy especiales. Las instalaciones de Fly-Pyr recibían la visita de varios aviones de aficionados procedentes de distintos puntos de España.
Los pilotos llegaban al Aeródromo de Santa Cilia desde diversas procedencias con aviones ultraligeros y elegían este lugar como punto de encuentro por sus características, por su situación estratégica  y por sus servicios. Durante una jornada de convivencia, disfrutaban de una comida en el restaurante antes de seguir viaje viaje hasta Bagneres de Luchon. En esta localidad tenían previsto pasar la noche antes de regresar a sus lugares de origen.

         

El Aeródromo de Santa Cilia es una plataforma ideal para este tipo de actividades y encuentros. Ofrece dos amplias pistas, piscina, restaurante y un ambiente agradable y acogedor para la realización de cualquier tipo de actividad relacionada con la aeronáutica o complementaria a ella. Además, el aeródromo contempla la opción de que las aeronaves  puedan repostar antes de continuar viaje, lo que supone una ventaja a la hora de planificar las salidas.
Por otra parte, en ocasiones, y si se dispone de tiempo, los participantes en este tipo de actividades tienen la posibilidad de probar la experiencia del vuelo sin motor.
Cada vez más, en Europa están surgiendo numerosas asociaciones de aeronaves de este tipo que, sobre todo de cara al buen tiempo, miran al sur para organizar jornadas de vacaciones y escapadas en compañía de amigos y familiares. Por sus características, los organizadores de este tipo de propuestas suelen huir de los aeropuertos comerciales, sujetos a normativas complejas que dificultan cada vez más la realización de este tipo de actividades.
En este contexto, el Aeródromo de Santa Cilia resulta una interesante alternativa para la celebración de este tipo de eventos. De hecho, el próximo 25 de julio, Fly Pyr acogerá una etapa de la Vuelta a Francia en ultraligero que reunirá a una caravana de casi 150 aeronaves, que dormirán en Santa Cilia y disfrutarán de una jornada de descanso antes de continuar su recorrido, dos días después.